Las almohadillas y la nariz de los perros son como sus “zapatos” y “antenas” para explorar el mundo, y por eso necesitan un cuidado especial. Un buen bálsamo hidratante para perros es clave para proteger estas zonas tan delicadas que se desgastan todos los días.
Problemas comunes en almohadillas y nariz
- Grietas y sequedad: ¿Has notado que las almohadillas de tu perro están ásperas? Esto es muy común por caminar sobre el asfalto caliente en verano o el pavimento helado en invierno.
- Nariz agrietada: Los cambios de temperatura o la falta de hidratación pueden hacer que la nariz de tu perro se reseque y se agriete.
- Molestias al caminar: Si no cuidamos sus patas, las molestias pueden empeorar hasta convertirse en heridas dolorosas.
¿Cómo ayuda un bálsamo natural?
Los bálsamos para perros hechos con ingredientes como la manteca de karité, el aloe vera o el aceite de caléndula son una maravilla porque:
- Hidratan en profundidad: Le devuelven la suavidad y elasticidad a la piel.
- Calman la irritación: Ayudan a que las zonas rojas o sensibles se sientan mejor.
- Regeneran la piel: Si ya hay algún daño, favorecen la regeneración de la piel.
- Crean una barrera protectora: Funciona como un escudo contra el frío, el calor y otros factores externos.
Consejos para usarlo
- Aplica una capa delgada sobre las almohadillas y la nariz limpias.
- Úsalo con regularidad, sobre todo en las estaciones más extremas (verano e invierno).
- Además, también puedes aplicarlo en la zona de los codos, de este modo se mantendrá hidratada y evitaremos la pérdida de pelo tan común en esa zona.
- ¡No te preocupes si se lame! Un bálsamo natural y seguro no le hará daño.
Cuidar de las almohadillas y la nariz es tan importante como el cuidado del pelaje. Con un producto adecuado, como el Bálsamo MD10, tu perro estará protegido y cómodo en cada uno de sus paseos.